viernes, 28 de octubre de 2011

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martes, 16 de diciembre de 2008

Resumen de History of the Present 4 (Spring 1988), 1-2, 11-13. Entrevista a Michel Foucaul por Michael Bess.

Uno de los significados de la existencia humana es no aceptar nada como definitivo, obvio, inamovible.
Ningún aspecto de la realidad debe ser definitivo o una ley para nosotrxs.
Debemos rebelarnos contra cualquier forma de poder, pero no solo el poder en su sentido estrecho que se refiere al poder de un gobierno o un grupo social que sojuzga a otro…El poder es aquello que tiene a tornar inmóvil e intocable aquellas cosas que se nos ofrecen como reales, verdaderas y buenas.

Tengo tres elementos en mi mora:1) el rechazo a aceptar como autoevidentes las cosas que nos son propuestas; 2) la necesidad de analizar y conocer… (Principio de curiosidad); 3) el principio de innovación: buscar con nuestra reflexión aquellas coas que nunca han sido imaginadas o pensadas. Rechazo, curiosidad, innovación.

El poder es un grupo de relaciones. El poder es una relación entre dos personas, una relación que no es del mismo orden que la comunicación.
Ejercer el poder es influenciar el comportamiento, guiar tu conducta, conducirla.
El grado cero del poder es la fuerza física, cuando es ejecutado como si te llevaran de la mano a hacer algo.
Es claro que el poder no debería ser definido como un acto de violencia que reprime a lxs individuxs, y los fuerza a hacer algo o no. Sino cuando hay una relación entre dos sujetos libres, y está relación no es equilibrada, entonces unx puede actuar sobre la otra parte, o esta parte permite que eso ocurra.

El poder no es siempre represivo. Puede tomar muchas formas.

La relación de poder desigual.
Las relaciones de poder no son en si mismas formas de represión. En la mayoría de las sociedades, se crean organizaciones para mantener congeladas las relaciones de poder en un estado de asimetría, para que un número de personas se aprovechen, social, económica, política, institucionalmente.
El poder es un tipo específico de relación que se ha institucionalizado, congelado, inmovilizado en provecho de algunos y detrimento de otros.



Un programa de poder puede tomar tres formas
a) Ejercer el poder tan efectivamente como sea posible
b) Atacar la cristalizació n del poder
c) Una posición intermedia: como limitar las relaciones de poder encarnadas y desarrolladas en una sociedad particular. Las condiciones aceptables para el ejercicio del poder no pueden ser definidas a priori. Son el resultado de relaciones de fuerzas dentro de una sociedad dada. A veces la desigualdad es tolerada por sus victimas durante un tiempo, que no es lo mismo que decir que la situación es aceptable. Pero no se puede proponer una formula definitiva para el ejercicio óptimo del poder.

Comenzando por concebir el poder como un ensamble de relaciones de fuerza, no puede haber una definición programática de un estado óptimo de fuerzas a menos que se diga “Quiero que los arios, blancos y puros tomen el poder y lo ejerciten” o “Quiero que el proletariado lo ejercite”.
El poder es una relación donde alguien guía el comportamiento del otro y no hay razón para decir que esa guía no puede tener efectos positivos, valiosos o interesantes.
El ejercicio del poder nunca debe ser algo auto- evidente. Un padre no tiene derecho a darle un chirlo a su hijo por ser padre. Incluso no castigar es una manera de darle forma al temperamento.
La única ética en relación al ejercicio del poder es la libertad de lxs demás.


Aquello que es bueno lo definimos nosotrxs, lo practicamos y lo inventamos, y es un trabajo colectivo.

lunes, 15 de diciembre de 2008

CUENTO DE NAVIDAD

José era carpintero, judío y gay. Haciendo uso de sus conocimientos, se había fabricado un gran armario en Belén, en el que vivía con su amiga María, al abrigo de la persecución homófoba que había desatado el imperio romano contra los homosexuales y los judíos de Jerusalén. María no había conocido varón, era lesbiana, y había decidido tener un hijo por inseminación artificial con el esperma de su mejor amigo, José. Ahora se encontraba a punto de dar a luz en el armario de Belén. La noticia corrió por el ambiente y llegó hasta los rincones más alejados de Oriente.
En el Kurdistán vivía el antiguo rey Melchor, que había sido destronado por los turcos cuando invadieron el país. Melchor tenía 50 años, llevaba una larga barba blanca que cubría un torso ancho lleno de vello que hacía las delicias de los pastorcillos kurdos. Había conocido a José en el cuarto oscuro de un bar de Ereván, la capital de Armenia, y sabía que él y su amiga María esperaban un niño, así que decidió ir a verles para celebrar con ellos el alumbramiento. Se montó en su camello con algunos regalos -una chupa de cuero para María, una botella de popper de Kazajstán para José y la última edición en pergamino del Planeta Marica- y se encaminó hacia Belén. Al llegar a un oasis en el desierto de Palestina Melchor hizo una parada para ir a mear junto a una palmera, y en ese momento se encontró con un hombre de hermosos bigotes, ya entrado en años, que estaba meando a su lado y que le miraba insistentemente. Melchor le invitó a pasar la noche con él en su tienda. Durante la cena el hombre le explicó que se llamaba Gaspar, era palestino y había sido rey. Casualmente también conocía a José y la noticia del parto, y en ese momento se encaminaba a Belén para conocer al niño y darles algunos presentes: opio iraní de la mejor calidad para ella y telas de Palestina para él. Melchor y Gaspar pasaron una apasionada noche de amor en el oasis, y decidieron ir juntos a Belén.
A los pocos días Melchor y Gaspar llegaron a Jerusalén, y decidieron ir a una sauna a descansar. En esos días de invierno la sauna era muy visitada, pues era un lugar cálido y tranquilo donde charlar y disfrutar. Melchor y Gaspar repararon inmediatamente en un hombre grande, de piel muy oscura y barriga peluda, que les fascinó de inmediato. Se acercaron a él con ánimo de conocerle, y les dijo que se llamaba Baltasar, era uzbeko, rey de una tribu del norte de Afganistán, y había huido de la represión que habían desatado allí la secta de los tulipanes contra las mujeres y los gays. Decidió dirigirse a Belén a ver a su amiga María, de la que sabía que estaba encinta, y le llevaba como regalo tres caballos árabes y un disfraz de drag-king. Entre los tres cundió un gran regocijo al descubrir la casualidad de conocer a José y María, y lo celebraron pasando la noche juntos.
Eran aquellos los días del rey Heterodes, quien gobernaba toda Judea con una gran homofobia. Un espía del rey había oído la conversación sobre María en la sauna, y se lo comunicó a Heterodes. Éste no podía soportar la idea de que una mujer lesbiana tuviera un hijo, así que decidió urdir un plan para matarle. Hizo llamar en secreto a Melchor, Gaspar y Baltasar y les interrogó sobre el nacimiento del niño, con la excusa de que quería ir él también a adorarle. Así que les pidió que una vez que le hubieran visto, volvieran para decirle el lugar de su nacimiento. Los Reyes Magos conocían la fama de Heterodes y, desconfiando de sus intenciones, partieron hacia Belén sobre sus camellos sin decirle su destino.
La noche siguiente hicieron un alto para dormir en la montaña y vieron en el cielo una luz muy brillante que se acercaba hacia ellos. Era un gran trineo tirado por renos alados, y guiado por un hombre grueso, con hermosos cabellos y barbas del color de los osos polares, vestido de terciopelo de color rojo. El hombre descendió desde el cielo hasta donde estaban los tres reyes y les miró, admirando la belleza de sus cuerpos y de sus rostros. Se llamaba Santa Claus, o Papá Noel, y pertenecía a una ONG finlandesa de gays y lesbianas. Los reyes se fijaron de inmediato en el paquete de Papá Noel, y le preguntaron sobre su contenido. Él les contestó que había oído la buena nueva del nacimiento del hijo de María, a la que conocía, y que en el paquete llevaba las obras completas de Tom de Finlandia y de Monique Wittig como regalo. Los Reyes Magos encendieron una hoguera e invitaron a Santa Claus a quedarse con ellos a cenar. Éste aceptó, y, tras la cena, les invitó a degustar distintos licores lapones que llevaba en su trineo. Los vapores etílicos calentaron sus cuerpos y les animaron al baile y al canto, y finalmente al amor.
Al día siguiente Papá Noel y los tres reyes se encaminaron a Belén. En el camino vieron a un grupo de cuatro pastorcillas que iban en su misma dirección, y que resultaron ser amigas de María. Iban también a verla por el nacimiento de su hijo, y le llevaban un carro como presente, dado que, según comentaron las pastoras, a María le gustaba mucho conducir todo tipo de vehículos. Ya al anochecer divisaron en el fondo de un valle la silueta de un gran armario, en el que estaban José, María y el niño, al que llamaron Emmanuelle, en homenaje a una famosa actriz de teatro asiria. María estaba apostada en la puerta del armario, de pie, con su cayado en la mano derecha, vestida con pantalones de piel y una pelliza de borrego; José, que cubría su cuerpo con una túnica de color verde oliva, estaba sentado dentro y llevaba en sus brazos a Emmanuelle, al que cantaba canciones de cuna con su voz grave y dulce, mientras el niño jugaba enredando sus pequeños dedos en las barbas negras del carpintero.
Cuando María vio llegar a tantos amigos juntos, tiró el bastón al aire y fue a su encuentro riendo. Los reyes magos fueron a buscar a José y le animaron a salir del armario. Éste, sorprendido por la visita, dio un grito de alegría y salió al aire libre con el niño para abrazar a sus viejos amigos. María propuso hacer una fiesta y disfrutar de los regalos. Pasaron la noche comiendo y bebiendo, Papá Noel recitó las viejas sagas islandesas con la voz adormecida por el opio, Baltasar bailó en honor de todos danzas de su tierra, rodeando al grupo con un círculo hecho con las telas de Gaspar, María cantaba poemas de Safo subida en uno de los caballos, mientras las pastoras, desde el carro, tocaban instrumentos de cuerda y percusión al ritmo de sus versos. Melchor y José mezclaban todo tipo de bebidas con abrazos, besos y recuerdos.
Emmanuelle miraba, fascinado, las altas llamaradas de fuego que se elevaban desde el armario hasta la luna.

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Javier Sáez

miércoles, 10 de diciembre de 2008

¡¡MATEMÁTICAS EN MISA YA!! ¡¡POR UN ESTADO LAICO!!

¡¡MATEMÁTICAS EN MISA YA!! ¡¡POR UN ESTADO LAICO!!

¡¡Matemáticas en misa ya!!
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Somos un grupo de docentes de todos los niveles educativos que estamos muy preocupados por el bajo nivel cultural en nuestra sociedad, los altos índices de fracaso escolar y la proliferación de telebasura.

Para salir de esta situación queremos traspasar los muros de las escuelas, los institutos y las universidades, llevando la cultura y la educación a ámbitos en los que hasta la fecha hemos estado ausentes, en los que nuestra dejadez ha privado a muchos ciudadanos del derecho universal a la cultura.

Como primer paso, queremos llegar a un acuerdo con las autoridades eclesiásticas para que nos cedan un diez por ciento del tiempo de las misas con el fin de que profesores especialistas en las distintas disciplinas puedan llegar más fácilmente a los creyentes mediante breves intervenciones didácticas.

Estamos estudiando cuál sería el momento idóneo para insertar en las misas contenidos científicos y culturales, tal vez inmediatamente después de la consagración o justo antes del padre nuestro.

Está claro que algunos feligreses podrían, con razón, objetar que ellos no tienen por qué aumentar sus conocimientos ni su cultura, ya que acuden a misa con el sólo fin de orar y escuchar la palabra de Dios.

Para solucionar este problema, y aunque pudiera parecer inconstitucional, a la entrada a la iglesia les haríamos rellenar un formulario para que manifestaran su preferencia por la religión o la cultura.

Una vez identificadas estas personas, podrían abandonar en el momento adecuado la nave principal de la iglesia y reunirse en las capillas laterales, la cripta o el salón parroquial. Con el fin de evitar agravios, estas personas podrían recibir durante ese rato charlas de carácter no cultural ni educativo pero muy relacionadas con los contenidos que se estén impartiendo en ese momento al resto de los fieles desde el altar.

Por ejemplo, los feligreses que no quieran repasar la tabla periódica, estudiarán los efectos perniciosos de los colorantes alimentarios, los que no quieran hacer ejercicios de educación física podrán ver un documental sobre la obesidad, y los que no quieran repasar los verbos irregulares ingleses podrían estudiar estadísticas sobre la importancia de hablar idiomas en el mundo moderno.

Los obispos nos han adelantado que no habría problema en computar el tiempo de cualquiera de estas actividades como tiempo equiparable al dedicado a escuchar la palabra de Dios, a la oración, a la contemplación, la penitencia o a la caridad y en ningún caso podrá discriminarse el acceso a la salvación eterna a los fieles en razón de sus preferencias religiosas o educativas.

Tampoco han puesto la más mínima objeción a la aparente contradicción derivada de que el contenido de las misas esté basado en la fe y las creencias, en contraste con la naturaleza científica y académica de los contenidos que habitualmente impartimos en las aulas.

En un primer momento, las clases se impartirían sólo durante las misas obligatorias de los domingos y fiestas de guardar, para más adelante extenderse a otros actos religiosos de asistencia no obligatoria como bautizos, bodas, comuniones, funerales, ejercicios espirituales, ordenaciones sacerdotales e incluso ceremonias de canonización o beatificación.

Pero, ¿de dónde saldría el dinero para pagar al profesorado que trabaje los domingos? Sin duda alguna de los donativos que los fieles depositan en los cepillos, del porcentaje de impuestos destinados al sostenimiento de la Iglesia Católica o, en general, de los presupuestos de la Iglesia.

Para garantizar la calidad de las enseñanzas impartidas, nuestra asociación gestionaría directamente el dinero aportado por la Iglesia y con él contrataría a profesores de sólida formación pedagógica y científica que se encargarían de impartir las clases durante las misas.

Naturalmente, dado el carácter eminentemente laico de las clases, no dudaríamos en despedir fulminantemente a aquellos profesores que no mantuvieran una coherencia laica entre su vida profesional y personal haciendo cosas como casarse por la iglesia, acudir a misa semanalmente o participar en cualquier tipo de actos religiosos.

Finalmente, llevaremos nuestras negociaciones hasta el mismo Vaticano, con cuyas autoridades firmaríamos un concordato que garantizara la continuidad de nuestra noble tarea docente en las iglesias durante los años venideros.

¿Te parece un disparate? ¿Te parece difícil de conseguir? No es tan disparatado ni tan difícil. Ahí tenemos el ejemplo de los acuerdos entre la Iglesia y el Ministerio de Educación en torno a la asignatura de religión y su alternativa.

Al final han conseguido lo que nadie hubiera creído posible.

Entre tanto, puedes hacer llegar nuestra propuesta educativa a docentes, padres, alumnos, políticos, sindicalistas, medios de comunicación e incluso a las autoridades eclesiásticas. Tal vez así contribuyamos a que se entienda mejor lo que está ocurriendo en relación con la enseñanza de la religión en los centros sostenidos con dinero público.



GASTEIZ
Abenduak 10 · asteazkena · 20:00etanApezpikutegiaren aurrean (Vicente Goikoetxea kalean)
DESPENALIZACION UNIVERSAL DE LA HOMOSEXUALIDAD
VATIKANOA, ISIL ZAITEZ!
10 diciembre miércoles 20.00 h
Frente al obispado (C/ Vicente Goikoetxea)

jueves, 27 de noviembre de 2008

Una historia intersex

Una historia intersex
Tomado del servicio de circulación de textos sobre transgeneridad e intersexualidad del área trans e intersexs para Latinoamérica y el caribe de IGLHRC. Para suscribirte escribinos.
Cuando nací, hace casi 34 años, mis padres me anotaron como un varón; tenía pene y testículos, próstata, cromosomas XY, no había ninguna duda: era un bebé varón, iba a crecer, convertirme en un chico que jugaba a los soldaditos y la pelota, y luego en un adolescente con granos en la cara, tendría muchas novias, me transformaría en un hombre, me casaría con una buena mujer, sería padre algún día… Pero en mi cuerpo había algo “problemático”. El final de la uretra (el canal por el que viajan la orina y el semen) no estaba en la punta del pene, sino que estaba en un costado. A ese tipo de conformación se la llama hipospadias. Mi pene era un pene “hipospádico”, y yo era un bebé con “hipospadias”. Lo que le dijeron a mi mamá y mi papá es que mi pene debía ser corregido, y debía ser corregido cuanto antes. Antes de que los otros chicos en la escuela se rieran de mí porque orinaba sentado. Antes de que orinar sentado afectara para siempre mi masculinidad (¡si hay algo que un hombre NO hace es orinar sentado!). Antes de que otras personas me vieran desnudo y se horrorizaran. Antes de que mi personalidad se viera perturbada por las burlas, la vergüenza de tener un cuerpo diferente. Casi no recuerdo nada de la primera cirugía, excepto el hecho de que le siguió una segunda. Y luego una tercera, y así hasta una novena. Cuando cumplí 13 años mis médicos finalmente parecieron satisfechos con lo que habían logrado: un amasijo de carne con cicatrices, pero con una abertura para orinar en la punta, que debía cada tanto abrir con un catéter. A veces hasta orinaba parado.
Durante todos esos años la “diferencia” de mi cuerpo, que tanto temor había causado, se hizo más y más evidente. Mi pene parecía cualquier cosa, menos “normal”, incluso “humano”. Pero al contrario de lo que mis médicos pensaban, encontré un grupo de amigos y amigas con quienes pude hablar de lo que me pasaba. No fue el paraíso, pero tampoco el infierno.
Me llevó muchos años reconciliarme con el cuerpo que hicieron para mí. Mi pene casi no tiene sensibilidad. Para que lo imagines: cuando alguien pone su mano sobre la piel, yo lo siento como si estuviera tocándome a través de muchas capas de algodón, o como si la piel estuviera dormida. Cuando era adolescente sentía que la insensibilidad se extendía como una neblina polar desde mi pene hacia el resto de mi cuerpo. Todavía me pasa de vez en cuando.
Las personas que defienden la realización de cirugías que “corrijan” los genitales muchas veces tienen miedo de que genitales “desviados” produzcan sexualidades “desviadas”. Toda mi vida me sentí atraído por hombres y mujeres, y el día que descubrí que también existían otros cuerpos me atrajeron también, de modo que la “corrección” de mi pene hizo bien poco por transformarme un correcto señor heterosexual, hizo bastante por transformarme en un pansexual sin sensibilidad en una porción de su cuerpo, en alguien abrumado por tanta exposición, revisación y operación, que prefirió durante muchos años tener sexo sin sacarse la ropa.
He aprendido lentamente a enamorarme de mi mismo, de mi cuerpo cortajeado e insensibilizado. En el momento en el que pude gritar que era un hombre me di cuenta de que afirmarlo no era suficiente. También necesitaba hacerlo pedazos. Presentarme como un hombre intersex es mi manera de decir que hay algo más que “hombres” y “mujeres”, y que a veces la “fabricación” física de la masculinidad o la feminidad puede ser un proceso muy doloroso. Para mí, como para muchas otras personas con historias similares a la mía, intersex no significa “hermafrodita”, ni “andrógino”; no significa “con dos sexos” o con “órganos de los dos sexos”; no significa “patología”, “malformación”, “ambigüedad”, “indefinición” ni “excepción”. Intersexualidad significa VARIACIÓN. Si existen un cuerpo femenino “ideal” y un cuerpo masculino “ideal”, los cuerpos intersex son todos los que VARIAN de esos ideales (porque el clítoris es “grande”, porque el pene es “chiquito”, porque la vagina no está, porque los labios no se ven como “deben” verse, porque la uretra no termina donde “debe”). La intersexualidad no es una enfermedad –no se opera para curarnos, sino para “corregirnos”, “normalizarnos”. Es por eso que las cirugías que se nos practican se llaman “cosméticas”: no curan nada, solo intentan “mejorar” la apariencia, sin darnos la oportunidad de elegir.
A medida que crecemos aprendemos que ser “diferente” en cualquier sentido nos puede convertir en blanco de la burla, de la discriminació n y de la violencia; aprendemos entonces a disimular o ocultar lo que nos transforma en personas distintas. Como resultado, el mundo es un lugar mucho más peligroso y más pobre para todos los seres humanos. Intervenir quirúrgicamente a un niño o niña intersex sólo porque su cuerpo se ve diferente al ideal de cuerpo femenino o al ideal de cuerpo masculino es una forma de ocultar que la diversidad existe; lo único que se refuerza es ese Ideal al que todas las personas “debemos” someternos. Crecemos como niños mutilados y niñas mutiladas, que deberán recorrer caminos muy difíciles hasta reconocerse como dignos y dignas de respeto, deseo y amor.
Ariel RojmanMás información sobre hipospadias y otras formas de intersexualidad en el sitio web de la Intersex Society of North America, www.isna.org

miércoles, 26 de noviembre de 2008

SOY NOSOTRAS

SOY NOSOTRAS
Liliana Daunes
Sujeta a la escoba, barre, limpia, aprende la disciplina del barrido, la tierra vuela, se desplaza, invade, ¿qué pasaría si dejáramos laservidumbre de la belleza y el agrado?, las buenas costumbres nos tornan dóciles. el lamento en solitario es injusticia, hay que registrar el tiempo perdido, las palabras del daño, esas que hicieron de tu cara el mapa de su victoria fálica, tu guión en la escena de la obediencia.
Vos pensás que estoy hablando de otro tiempo, que eso no pasa, ¿han doblegado tu pasión arisca, acaso? Así es más fácil, quieren sólo una parte tuya, ¿el agujero?, porque a veces en eso nos convierten, ¿todavía no sentís el dolor? las miradas desgarran las ropas y hacen de la violación un espectáculo público repleto de cómplices. No es nuestra tarea soportarlo. Sujeta la escoba, agita tu arma, otras volaron y fueron quemadas, hoy el fuego se enciende en el plan, la beca, la cámara, la cárcel, el dinero, ¿por qué nuestros cuerpos deben humear en la pira de la pobreza?
Hay que detener las agresiones, otros no tienen derecho ni propiedad sobre tu cuerpo, debemos dejar la esclavitud de la espera de que algún día cambiarán las cosas, hoy hay que cambiarlas, hoy es día de revelaciones y de revoluciones, de rebeldías multiplicadas, sólo la rabia nos salva, - y también la ternura. -, así aprendimos a sobrevivir.Nuestras palabras son la amenaza de que las cosas pueden cambiar.
Hincá tus dientes en la carne del patriarca, para reconocer su sangre y dar alarma a las demás, infundí fuerza, hagamos del dolor nuestra rebeldía.El 25 de noviembre, se conmemora el día internacional por la no violencia hacia las mujeres, día de denuncia del maltrato físico y psicológico, también día de visibilizació n de las resistencias.Si la violencia circula, nuestra resistencia también.
Porque yo soy...María Soledad, violada y asesinada en Catamarca... Teresa Rodríguez, muerta cuando reprimían un piquete, allá en el sur... Sandra Cabrera, asesinada en Rosario, Liliana Tallarico, asesinada en La Plata, Soy las mujeres de Juarez. Soy todas las asesinadas por odio.Y también soy Romina Tejerina, presa y recluida en Jujuy... y Claudia Sosa de Mendoza y Etelvina y Patricia, y la Galle, presas...
He sido violada por Hoyos en Salta.
Soy Eli Díaz, violada por Benavidez en Córdoba.
Soy Leyla y Patricia violadas y asesinadas en Santiago del Estero, Soy... las mujeres asesinadas en Mar del Plata, la trabajadora violada en el ANSES, las niñas violadas en el Congreso...Soy María, me violó mi papá.
Soy Marita, Vanesa, Lidia, Fernanda, Andrea y tantas secuestradas para el tráfico sexual en La Rioja, Tucumán, Córdoba, Corrientes, Río Gallegos, La Pampa...
Soy Carolina, a mi madre la desapareció la dictadura militar.Soy las abusadas por los curas y el poder.
Soy Paulina, mi crímen sigue impune, soy tucumana.Soy las originarias desterradas de sus casas, soy las wchis desnutridas, soy la beba que no llegó al hospitalSoy la niña de once años violada y embarazada, no se qué hacer, no hay ley que nos ampare.Soy... una africana sin clítoris, una musulmana que pueden lapidar, una colombiana desplazada, expuesta a la violencia paramilitar.
Soy nica, soy feminista, el gobierno me persigue.
Soy uruguaya, repudio la dictocracia que me criminaliza si decido sobre mi cuerpo.
Soy una haitiana violada por un soldado de la minustah.
Soy una mujer estéril por un aborto mal practicado, soy aquella que murió tras un aborto clandestino,Soy Ana María Acevedo, quería abortar para curar mi cáncer, me dejaron morir en un hospital de Santa Fe.
Yo soy la castigada, la invisible, soy la maltratada. ¿Quién ha cavado estos agujeros? ¿Quién ha roto mi mirada? ¿Quién ha desoído mi respiración de espanto? ¿Quién ha cortado, golpe a golpe, los pedazos que me arman? Me repliego, muda, las palabras vuelan lejos, no las sujeto como si me esquivasen desde el principio de los siglos, palabras vacías que se deletrean sonido a sonido perdiendo su significado.
Como toda criatura marginada, expoliada, espiada y exiliada, me quedo sin lenguaje.Entonces recuerdo que existe el grito.Que puedo gritar: Soy MUJER, TRAVESTI, TRANSGENERO, TRANSEXUAL, LESBIANA, INTERSEX, BOLIVIANA, NEGRA, MUSULMANA, INDIA, INMIGRANTE, POBRE, OPRIMIDA...
Soy la que está harta, la que se rebela, la que se organiza, la que quiere cambiar las relaciones sociales, la que quiere desterrar la injusticia, la que lucha contra el patriarcado.Dicen que dicen las Mayas "ill da quesh", soy otra tú.Eso, soy otra vos, y otra voz, y soy miles de voces que, tomándole un verso a Neruda gritan, gritamos: sube a nacer conmigo, hermana!!!Porque siempre, siempre, se puede volver a nacer.
(podemos seguir agregando "soy."les pido que sumen a quienes consideren)
www.marcaderadio. com.
arliliana dauneswww.
larosabrindada. blogspot. com